“Nada me queda bien”

Sentite divina, pero no te obsesiones.Ya no soportás que una vendedora te pregunte cómo te quedó la remerita mientras estás dentro del probador intentando no morir estrangulada por un talle small. Estás cansada de que en los locales más fashion te respondan que no les quedan jeans para vos, y verte obligada a volver a tu casa con las manos vacías y el corazón lleno de angustia. A esta altura, sentís que el mundo está decidido a impedir que te sientas cómoda con tu cuerpo…
Una de las tantas causas de este “complot” son los modelos de belleza que la sociedad nos impone: chicas que están muy lejos de poseer las curvas y el peso de una mujer real. Sin embargo, la mayoría de nosotras se deja engañar y termina creyendo que lo que se muestra es verdadero.
Pero ¿qué hacer para que esto no se vuelva una obsesión? ¿Cómo no sentirte mal cuando no te entra el conjuntito que viste en la vidriera? Primero que nada, la doctora Susana Bidolsky, directora de la Especialización en Psicoanálisis de Niños y Adolescentes del Instituto Universitario de Salud Mental de Apdeba, nos dice que “la cuestión es dejar de ponerse sólo lo que la moda dicta y empezar a usar lo que nos favorece”. Esta es una regla de oro que todas tenemos que aprender para no perder personalidad y para desarrollar una identidad fashion propia. ¿O acaso te divierte ir a una disco donde más de una chica tiene tu misma musculosa?
“No encontrar la ropa que te queda bien, puede llevarte a pensar que no sos exitosa, popular o atractiva”, nos explica la psicoanalista. Por eso, es súper normal que te desilusiones un poco, pero cuando la preocupación por la imagen se vuelve mayor, debés revisar qué se oculta detrás. Prestá atención porque puede tratarse de “una frustración más profunda” en la que sólo hay dos opciones para elegir:a- Dejás que el espejo no te permita ver lo que realmente está pasando. b- Te animás a mirar más allá del talle de tu pantalón.Vos decidís.

Yanina Ballabriga